Volvimos de vacaciones. Realmente fue como si una fuerza interna me succionara para meterme más y más profundo dentro de Él. Cada vez que me ocurría pensaba. Pero podré estar más dentro aún? Y sí, sí podía.... Fueron días intensos, mágicos, llenos de cosas distintas, sin planificar pero que parecían hechas con los dedos de Dios. Fue entrar en un paraíso interior...
Al regresar, yo aún tengo unos días libres en los que estoy dedicandome a arreglar las cosas de casa pendientes cuando lo urgente deja de lado a lo importante... Pero mi Señor se va al trabajo y me hace falta... Me hace falta sentirlo cerca las 24 horas del día como cuando estábamos de vacaciones... Me hace falta poder servirlo constantemente, me hace falta ver cómo se clavan sus enormes ojos verdes (o grises o azules dependiendo del tiempo) en mí... Cómo me desnuda con sus silencios y me hace suya... Es el costo de las vacaciones, cuando vuelves, necesitas de nuevas vacaciones para reponerte de ellas.
En fin, que ya estoy de regreso, que toca solucionar los pendientes y que en pocos días ya estaré en el trabajo nuevamente junto a mi Señor todo el día, así podré sentir que todo el tiempo puedo servirlo y cuidar de Él
Hola mi niña, aquí estoy yo una vez mas presente en este rincón encantador. Y como dice la canción Resucitar...
ResponderEliminarUn saludo a su señor de mi parte, y un beso enormeeeee para ti preciosa. Gracias a vosotros por todo lo bueno que me han portado mis consejeros jijiji.